Con un 1 a 0 bastante agitado, el Xeneize le gano a Gimnasia y se quedó con tres puntos necesarios para el futuro del club.
Boca empezó muy impreciso, errando muchos pases. La primera clara fue un desborde de Chango, que nunca se la da a Cavani, que venía corriendo acechando el gol. El 10 de Boca ni llegó a poder reclamarle a Zeballos “larga la pelota nene”, cuando Milton Giménez quedó solo en el área a los 15 minutos y, tras el pase del Chango, la para con la derecha, gira y le pega de zurda para abrir el marcador. Gago confío en el momento de Giménez y el 9 está cumpliendo y convirtiéndose en el mejor refuerzo del 2024 para el Xeneize. Luego de los festejos hubo un cruce entre Cavani y el Chango, y a Zeballos no le gustó nada la llamada de atención del matador.

La hinchada sur de Boca quedó recalculando cuando, luego de un disparo de Mamut, afuera del área, Brey no pudo contener una pelota que parecía fácil y esta le pasó entre las manos, pero no entro al arco porque se desvió en uno de sus pies.

A los 32 minutos, Rojo metía un golazo de cabeza desde afuera del área, pero fue anulado por offside de Milton, que impidió que el defensor de Gimnasia llegue a rechazar a tiempo. Jugada a discutir porque ni Castillo, ni los defensores de Gimnasia saltaron o llegaban a rechazar la pelota.

Boca tuvo momentos de buen fútbol y llegadas, pero no pudo aumentar el marcador y se fue al descanso con el fantasma del empate que ya vivió el miércoles pasado por Copa Argentina. El que estuvo presente en la Bombonera fue Thiago Messi con la delegación del Inter de Miami.

A los 3 minutos del segundo tiempo, Milton casi clava el segundo en el ángulo tras una jugada en velocidad y a pura gambeta de Zeballos. Hasta el relator la vio adentro y estuvo a punto de empezar a gritar gol. Un minuto después se la perdió Cavani, que la picó y la pelota se fue afuera por un costado. Al lado tenía a Zeballos, que parecía habilitado, pero el matador se la sacó.

Boca fue más que Gimnasia, pero estuvo muy impreciso en las decisiones finales, haciendo que el Lobo se anime en los minutos finales. El que se erró otro gol fue Janson que, tras quedar solo frente al arco, en vez de patear a la parte libre del mismo le apuntó a donde estaba el arquero. La verdad, el nivel de Janson en Boca es para devolvérselo a Vélez con un moño. El ingreso de Fabra, que nadie entiende cómo sigue teniendo oportunidades, provocó silbidos en la gente, pero el que sí se fue ovacionado fue Milton Giménez de gran partido.

Boca tuvo un partido de buenos momentos futbolísticos con un Pol que se acordó tarde de jugar bien, pero con un Zeballos que en muchas hizo una de más. Al final, otra vez el Xeneize termina pidiendo la hora por no poder liquidar el partido a tiempo.

A pesar de la victoria luego del horrendo año, Boca sólo puede pensar en ganar los dos últimos partidos y que al menos la hinchada tenga una fiesta en el clásico contra el Rojo. Por el momento, el equipo de Gago se asegura jugar el repechaje de la Libertadores y depende de que River o Talleres pierdan 6 puntos para intentar con victorias entrar en forma directa.

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