River perdió de visitante por 2-1 contra Independiente Rivadavia y la épica deberá seguirá esperando.
La pesadilla de González Pírez abrió el marcador para Independiente Rivadavia a los 7 minutos del primer tiempo. Tras un gran pase filtrado de Tonetto, Villa le ganó en velocidad a Gatoni para después enganchar y clavarla en el arco, haciendo imposible que Armani llegue.

Minutos después, empezaron las polémicas: primero Naza cobró una rápida mano en el área tras un cabezazo de Solari, sin tener en cuenta que el jugador de River estaba adelantado. El VAR anuló la decisión del árbitro, pero este se sacó las ganas minutos después cuando la pelota pegó en el codo de Studer, que estaba girando con el brazo pegado al cuerpo para tapar el remate. El VAR llamó a Naza para que vea la jugada, pero este parece que tenía que cobrar si o si un penal. Colidio fue el encargado de convertir la sanción en gol y empatar el resultado.

Independiente Rivadavia salió con todo en el segundo tiempo, teniendo tres chances claras en una misma jugada, pero se encontró con un Armani gigante. Las polémicas continuaron luego de una fuerte falta de Colidio a Villalba que, si jugaba con otra camiseta, era roja. Como dije en la anterior nota de Vélez, las coloradas son para algunos sí y otros no.

El equipo local tuvo las mejores chances para ganar el partido, pero la hinchada decidió empezar una fiesta antes de tiempo prendiendo bengalas y enfriando el encuentro, que debió detenerse por el humo que llegaba a la cancha.

En el final, Borja tuvo dos oportunidades de darle la victoria al millonario con un remate cruzado que se fue al lado del palo y un cabezazo que se desvió. Luego, Aliendro se llevó puesta la pelota frente al arco al sacarle la vista a la misma, que se fue afuera. En el suplemento, un centro de Borja casi se clava en el ángulo, pero apareció Centurión para amargar al equipo del Muñeco.

Faltando segundos, se hizo justicia al gran partido que jugó el local y Ham metió el gol de la victoria tras un excelente centro atrás de Villa. El partido terminó con peleas después de que se pique todo entre González Pírez y Villa, sumándose a la persecución el Pity.

La fórmula de los cambios de Gallardo (Pity, Borja, Mastantuono y Bareiro) no funcionaron esta noche y Armani fue la figura del partido tapando nueve remates al arco, semejando al nivel del 2018. Faltando 12 puntos en juego, ahora River está obligado a ganar y esperar que Vélez pierda puntos.

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